¿Serías capaz de proteger y almacenar 360 mil millones de horas de conferencias web empresariales?
Por: Juan Carlos Gutiérrez, director IBM Storage LA
Estamos en uno de los puntos de inflexión de la historia. Nuestro mundo, que era cada vez más digital, está viviendo un cambio acelerado por la situación actual. Cada día, vemos a más empresas apostando a la creación de plataformas de negocios (desde páginas, aplicaciones, servicios online,..) para solidificar su ventaja competitiva y su diferenciación.
¿Pero esto que produce? La explosión de datos.
De hecho, según IDC en el estudio «Worldwide Global DataSphere Forecast, 2020–2024» para el 2024 los datos globales crecerán aproximadamente a 143 zettabytes de datos creados, capturados, copiados y consumidos, alojados tanto en la nube como en los datacenters. Para entender mejor estos datos, un Zettabyte corresponde a 1.000 millones de Terabytes o a 1 billón de Gigabytes. Entonces 143 Zettabytes de datos, equivalen a 360 mil millones de conferencias web empresariales.
Si regresamos 10 años atrás, las empresas de mayor capital eran las empresas de petróleo. Sin embargo, las empresas de mayor capital en esta era actual, son los grandes generadores de datos, como los cyber retailers, la banca, las empresas de transporte o inmobiliarias online, y empresas de streaming.
Y es que el avance tecnológico, con el consiguiente aumento de dispositivos interconectados, trae consigo un incremento de los datos generados, analizados y almacenados en todo el mundo. Estos datos son generados tanto por consumidores como por las empresas.
De hecho, se espera que el número de interacciones personales por día, que impliquen el intercambio de algún tipo de dato, se multiplique por 20 en los próximos años. Y esto pasará cada vez más a medida que nuestros hogares, lugares de trabajo, vehículos, dispositivos portátiles, etc., estén conectados y arrojen una mayor cantidad de datos.
Los dos paradigmas de la explosión de datos: el almacenamiento y la protección
En un mundo con un ritmo frenético, las empresas que sean capaces de tomar decisiones informadas en tiempo real, tendrán una mayor capacidad de adaptarse a nuevos contextos de mercado, crecer de forma inteligente, y responder mejor a las necesidades de sus clientes. Esto sólo se dará si cuentan con una estrategia de almacenamiento que permita un análisis y acceso inmediatos a los datos.
Pero este nuevo contexto, también puede exponer a las empresas a mayores amenazas y costos relacionados al robo de datos y cibercrimen. Todas las compañías, independientemente del tamaño, están expuestas a los ciberataques. De hecho, un estudio de IBM predice que para 2021 las compañías serán víctimas de ransomware cada 11 segundos, por lo tanto, la estrategia de ciberseguridad y ciber-resiliencia, son clave.
No se trata solo de «si» sufrirá un ataque de seguridad, sino de «cuándo». La mayoría de las estrategias de seguridad hoy en día se centran en la capacidad de prevenir violaciones de seguridad y, cuando ocurre una, resolver ese ataque. Ataques que pueden tomar horas, días e incluso semanas para remediarlos.
Esta realidad hace que la infraestructura de almacenamiento sea esencial para evitar el impacto de los ataques cibernéticos en las empresa y sus datos. La infraestructura de almacenamiento debe ofrecer las tecnologías adecuadas para crear una estrategia holística de seguridad cibernética para los datos corporativos, tanto los que están almacenados, como los que están siendo intercambiados.
Y es que al final, todos nos vamos a beneficiar de los datos que generamos. Las empresas, verán reflejados estos datos en mejores productos y servicios, y en mayor ventaja competitiva; y el consumidor, disfrutará una experiencia más personalizada.
Pero con los datos como base de la nueva economía, la capacidad de almacenamiento seguro será pieza clave para la confianza en la era digital.