Protégete contra el Fraude
Los fraudes son perpetrados principalmente para obtener dinero, propiedad o servicios; evitar pagos o pérdida de servicios; y asegurar una ventaja personal o de negocios. De acuerdo con estos conceptos, a nivel de fraude financiero, en las empresas se hablan de las siguientes tres (3) categorías:
- Corrupción: casos de sobornos, conflicto de intereses, uso de influencias, manejo inadecuado de las relaciones con los agentes aduanales extorsiones y pagos inapropiados.
- Malversación de fondos (Activos): robo de bienes, falsificación de cheques de la empresa, desvío de fondos, creación de pagos ficticios y el uso personal de los bienes de la empresa.
- Fraude en estados financieros: registro ficticio de ingresos, reporte de activos falsos, aseveraciones inapropiadas
Dado que alrededor del 60% de los países se encuentran por debajo de 50 puntos en el CPI (Corruption Perception Index por su siglas en inglés), los entes reguladores internacionales se han estado enfocado en tratar este tema tan crítico como lo es la corrupción; sobre todo gracias a los nuevos mercados emergentes que son países con índices elevados de corrupción. Para ello, se han establecidos distintas legislaciones globales y locales en varios países donde, de no cumplirse, las consecuencias pueden ser inmanejables. Dentro de estas legislaciones tenemos la Foreign Corrupt Practices Act (FCPA), la UK Bribery Act, La ley contra la corrupción de Brasil, el Estatuto Anticorrupción de Colombia, entre otros. En Venezuela, disponemos de varias regulaciones que abordan el tema del fraude:
- Ley contra la corrupción, 2014.
- Ley Orgánica contra la Delincuencia Organizada y Financiamiento al Terrorismo, 2012
- Ley especial contra el delito informático, 2001.
- Ley sobre el delito del contrabando, 2010.
- Ley orgánica de Drogas, 2010.
Ante la existencia riesgos de fraude y para dar cumplimiento a las regulaciones, es clave para toda empresa, sin importar el tamaño, considerar que para combatir el fraude es necesario atacar y cuidarse en función de las cuatro (4) aristas del reciente Diamante de Fraude, el cual agrega la Capacidad como nuevo factor a las tres (3) aristas del “triángulo del fraude” de Dr. Cressey (Incentivo, Oportunidad y Actitud). Para ello, se deben cubrir ciertos aspectos claves en el gobierno corporativo de la empresa, teniendo especial atención en el sistema de incentivos, medidas disciplinarias y distintos códigos de ética y conducta. Se deben diagnosticar, analizar y evaluar los distintos procesos del negocio para cubrir las posibles brechas al fraude, tener auditorías especializadas, entre otras evaluaciones claves.
La fórmula para proteger a las empresas del fraude no es única; va a depender de muchos factores críticos. Sin embargo algo es seguro, se necesita conocer y evaluar.
Consejos y recomendaciones
- Capacitación y evaluación continua, al personal, sobre temas de fraude
- Auditorías especializadas
- Seguimiento continuo a terceros y a la gestión de pagos
- Evaluación y actualización constante de los riesgos y controles
- Establecimiento de programas anti-fraude: código de ética, políticas, procedimientos, entre otros
- Establecimiento de línea de denuncias anónimas
- Tropicalización de prácticas líderes regionales