WiMAX y la penetración de la banda ancha en América Latina
Chile, uno de los países Latinos que posee un mayor índice de penetración de Internet y banda ancha en América Latina, logró, recientemente, una gran conquista para la región. Con el objetivo de fomentar el desarrollo comercial de las pequeñas y medianas empresas, así como de áreas relacionadas con el turismo y la agricultura, se anunció la adopción de WiMAX para las conexiones de alta velocidad y de largo alcance. Esta tecnología alcanzará a más de tres millones de personas (1.500 localidades rurales chilenas hasta entonces sin acceso a la Internet) gracias al proyecto “Infraestructura digital para la competitividad y la innovación”, impulsado por el gobierno. Se espera que para octubre del 2009 la conexión ya esté disponible para un 30% de las localidades contempladas y, hasta marzo de 2011, para la totalidad de las mismas.
La subasta se realizó el día 18 de marzo y otorgó a Inverca 30 Mhz de espectro en la banda de 2,3 GHz. Todas las localidades beneficiadas por la tecnología de conexión WiMAX tendrán la posibilidad de contratar los servicios de esta empresa, que operará obedeciendo a las condiciones establecidas por el gobierno. Las escuelas y los núcleos de salud tendrán acceso a Internet gratuitamente, ya que ésta será financiada por el gobierno y funcionará como infocentros para los vecinos.
La iniciativa es el primer paso dado en el sentido de aumentar la penetración de banda ancha en la región, como una forma de estimular el empleo, que, según investigaciones[1] podría crecer entre 0,2 y 0,3 puntos porcentuales por año, además de la posibilidad de que se multipliquen las oportunidades económicas; se estimule la innovación; aumenten el intercambio comercial y la productividad; y se reduzcan los costes comerciales de crear puestos de trabajo y atraer inversiones extranjeras. La iniciativa del gobierno chileno generó inversiones iniciales del orden de USD 100 millones, venidas de Packet One, empresa de Malasia con gran experiencia en WiMAX y que también reúne a un grupo de empresas chilenas llamado Inverca Telecomunicaciones.
Expandir las redes de banda ancha a áreas no metropolitanas también ayuda a aumentar el atractivo del trabajo relacionado con la agricultura y beneficia a personas que habitan en esas áreas en dos frentes: disminuye la necesidad de emigrar a los grandes centros urbanos y les proporciona condiciones a las personas que desean prepararse para una profesión en las grandes ciudades.
Algunos países ya experimentan los resultados de las inversiones en conexiones de alta velocidad. Entre 1998 y 2002 las primeras comunidades en Estados Unidos que adoptaron la banda ancha masivamente constataron un rápido crecimiento en el número de empleos y en los negocios de los sectores que utilizan la TI intensivamente. El crecimiento para la economía, en esos casos, gira alrededor de USD 460.000 millones por año. Los cálculos realizados por Accenture en el 2003 sugieren que la banda ancha podría aportar USD 500.000 millones al PIB de Estados Unidos y hasta USD 400.000 millones al europeo.
Una investigación sobre más de 2.000 empresas en Estados Unidos destacó que las soluciones comerciales basadas en Internet ya significaban en 2001 unas ganancias de cerca de USD 600.000 millones y aumentarían en 43 puntos porcentuales el crecimiento futuro de la productividad hasta el 2011.[2]
La noticia anunciada por el gobierno chileno es un hito para América Latina y podrá modificar el panorama de la región, ya que sólo un 1% de las personas que poseen acceso a la banda ancha en el mundo están localizadas en países emergentes. En el 2007, la penetración mundial de la banda ancha llegó al 5%, incluso con el crecimiento de sólo 1% en África, pues en el continente americano ascendió al 10% y en Europa, al 16%, según los datos recogidos en el “Inventario de la Conferencia Mundial Sobre La Sociedad de La Información” realizada por la UIT (Unión Internacional de Telecomunicaciones). Según la UIT, en los países desarrollados, las tasas de penetración de la banda ancha sobrepasan con frecuencia la marca del 30%.
En el caso de Colombia, el Ministerio de Comunicaciones publicó recientemente un borrador de decreto que permitiría la apertura de la banda de 2.5 GHz, lo cual facilitará la adopción de la verdadera banda ancha inalámbrica móvil en el país. Se espera que en los próximos meses, este proyecto se pueda llevar a la práctica con tan buenos resultados como en el caso de Chile.
Otros proyectos están en curso en América Latina, con la finalidad de traer la experiencia de los países desarrollados a nuestra realidad. WiMAX es una tecnología que está lista y a nuestra disposición para que la implementemos en la región.